Trabajo Nº: | RES0096 |
Tipo: | Oral |
Tema: | Symposium autoorganizado |
Autores: |
María Ángeles Chavarría Aznar Universidad Europea de Valencia (Máster Universitario en Formación del Profesorado) mariaangeles.chavarria@universidadeuropea.es Elisa Codoñer Solá Universidad Europea de Valencia (Máster Universitario en Formación del Profesorado) elisa.codoner@universidadeuropea.es Sonia Bernal Chico Universidad Europea de Valencia (Máster Universitario en Formación del Profesorado) sonia.bernal@universidadeuropea.es |
Keywords: | educación, competencias emocionales, aprendizaje, prácticas externas, tutor |
Las Prácticas Docentes constituyen una parte fundamental y necesaria en el aprendizaje para el futuro desempeño laboral de los estudiantes. A través de ellas se consolidan y aplican los conocimientos adquiridos en su formación académica. En el presente texto se analiza y muestra las dificultades que afronta y las competencias que adquiere el estudiante del Máster Universitario en Formación del Profesorado en Enseñanza Secundaria, Bachillerato, Ciclos Formativos, Enseñanzas Deportivas y Escuela de Idiomas ofertado por la Universidad Europea de Valencia. Es un máster habilitante al que se puede acceder desde cualquier titulación universitaria y se habilita en la especialidad elegida. Consta de 60 créditos ECTS y su duración es de 9 meses. El máster es semipresencial, dos sábados al mes presenciales y dos online a través de casos reales, seminarios virtuales, foros y herramientas colaborativas del Campus Virtual (Blackboard) mediante la metodología learning by doing. A excepción de las prácticas profesionales que, tal como establece la Orden ECI3858/2007, la universidad garantiza el carácter presencial del periodo de prácticas que llevan a cabo los estudiantes de este máster, así como que el Prácticum se realice en colaboración con las instituciones educativas establecidas mediante convenios entre la Universidad y Administraciones Educativas. La oferta de centros de prácticas externas constantemente se va renovando y ampliando. La entidad cuenta con un departamento propio de Carreras Profesionales que se encarga de apoyar a los estudiantes en la búsqueda de la mejor oportunidad para hacer sus prácticas externas, así como en otras cuestiones como la búsqueda de becas y de empleo.
La formación integral que ofrece este máster no se podría conseguir sin un módulo de prácticas en centros locales o nacionales guiado por un mentor que trabaja personalmente con el futuro docente. Las prácticas externas son un elemento clave en la formación del estudiante. Adquirir experiencia, después de lo aprendido en el resto de asignaturas que componen la titulación, es la mejor forma de entrar en el mercado laboral. Se ofrecen dos tipos de prácticas: las curriculares (incluidas en el plan de estudios) y las extracurriculares (las que el estudiante puede hacer de forma voluntaria una vez finalizado el periodo de prácticas requerido por el programa de estudios).
Para realizar las prácticas curriculares en instituciones educativas externas a la universidad se exige tener como mínimo el 50% de los créditos del Máster aprobados. Desde la experiencia de todas las ediciones pasadas del máster podemos constatar que a más formación teórica disponga el estudiante, mayor aprovechamiento de la experiencia de prácticas. Estas prácticas llevan un seguimiento por parte de los centros de prácticas, a través del tutor en el centro, y del profesor de prácticas o tutor en la Universidad. Este último acompaña al estudiante desde que comienza la asignatura hasta la consecución final, con la entrega de la memoria y el envío de la evaluación al tutor del centro. Los estudiantes en prácticas deben realizar informes intermedios y finales para su evaluación.
A continuación, se describirá y argumentará el desarrollo de las prácticas y sus objetivos, contenidos, sistema de evaluación y demás aspectos relativos a la asignatura. Así como el rol de los docentes de los centros de prácticas y de la Universidad, las competencias que se pretende trabajar y el modo de hacerlo. Además de aportar el diseño para la recogida de datos y su vínculo con las competencias emocionales.
El módulo relativo a Prácticum tiene por objeto completar la formación teórico‐práctica del futuro docente a través de una vivencia real de la profesión, desarrollando el desempeño en los diferentes ámbitos de actuación de una comunidad educativa. Se pretende que en este período de prácticas el estudiante ponga en evidencia todo el desarrollo competencial que supone este programa de máster.
El desarrollo de este periodo de prácticas, para garantizar el aprendizaje del alumnado, estará tutorizado por dos profesores, uno desde la Universidad europea de Valencia (UEV), y otro por parte del centro escolar, con la intención de poder proporcionarle al estudiante un seguimiento que enriquezca su experiencia formativa en el centro escolar. Este periodo, dado que pretende aglutinar todo el “saber hacer” de un profesor en un centro de secundaria, garantizará el contacto con las distintas tareas que le son propias, incluyendo la toma de contacto con los departamentos transversales del centro escolar y los órganos colegiados que lo componen (Departamento didáctico, Comisión de Coordinación Pedagógica, Departamento de Orientación, Juntas de Evaluación y Claustros de Profesores/as). El modelo de la Universidad Europea pone especial énfasis en la madurez y autonomía del estudiante, de forma que éste aprenda a adaptarse a un mundo cada vez más complejo y en perpetuo cambio.
Los estudiantes de la Universidad Europea (learning by doing) adquieren conocimientos y desarrollan competencias y valores con un modelo académico en el que se aprende haciendo, en un entorno multidisciplinar, internacional, inmerso en la profesión desde el primer día, y en el que el uso del espacio y la tecnología ha revolucionado la forma en la que ocurre el aprendizaje. Las metodologías activas conciben el aprendizaje como un proceso constructivo en que se desarrollan competencias específicas y transversales que garantizan la formación integral del estudiante. Estas metodologías, que son los pilares del modelo académico de la Universidad Europea, aumentan la motivación, desarrollan competencias transversales y requieren la máxima participación de los alumnos.
Un principio básico en los programas de formación de docentes es promover la integración entre teoría y práctica. En este sentido, la estructura del máster favorecerá la interacción entre las prácticas y los demás módulos, que deberán poder contribuir tanto a la preparación del Prácticum como a la reflexión sobre el mismo y su valoración. La evaluación del Prácticum se llevará a cabo tanto por el tutor en el centro educativo como por el tutor de Universidad.
El tutor del centro valorará de manera exclusiva, en tanto observador directo y en primera instancia de la actividad del alumno en el centro educativo, su actitud personal y su actitud docente, manifestadas en las tareas realizadas en dicho centro. La Ficha de Evaluación por el tutor del centro deberá cumplimentarse en la plataforma UEVALUA, la plataforma tecnológica de evaluación de Actividades Formativas Ubicuas (AFUs), que permite realizar la gestión, evaluación y seguimiento de prácticas que realizan los alumnos en los diferentes centros y empresas asociadas. El manual de uso de la plataforma se encuentra subido en la plataforma Blackboard (campus virtual) junto al resto de documentación e información que el estudiante necesita. Será el tutor/a de la Universidad el que calificará la Memoria de prácticas y el encargado de firmar en exclusiva las Actas de calificación.
El objeto fundamental del Prácticum es que el alumno conozca, bajo la tutela y el asesoramiento de un tutor de la etapa educativa correspondiente, el funcionamiento de un centro educativo al que haya sido asignado y lleve a cabo en él la experimentación práctica de las enseñanzas recibidas en las materias teóricas del Máster. Se trata, en consecuencia, de que el estudiante pueda anticipar el mayor número posible de experiencias educativas comunes para cualquier docente con las que previsiblemente va a encontrarse en su ejercicio profesional futuro.
La metodología de las prácticas se compone de dos fases. En la primera fase del Prácticum las tareas del estudiante se centrarán en la observación de la realidad educativa en su centro, en conocer y analizar la actuación docente del tutor asignado. En una segunda fase y a criterio del tutor del centro, las tareas del estudiante serán de intervención en el aula, con distintos grados de responsabilidad, bajo la supervisión del profesorado tutor. Esta fase pretende de modo principal formar a los alumnos de manera práctica en las habilidades, destrezas y capacidades propias de la labor docente a través de su intervención directa en el aula. En esta fase del Máster el alumno debe, pues, experimentar la planificación, la docencia, la tutoría, la evaluación, compartiendo experiencias con profesores de la especialidad y evaluando su propia actuación como docente de dicha especialidad.
Las diversas intervenciones incluirán actividades como:
Por su importancia, el alumno dedicará al menos la mitad del número de horas de su Practicum a este tipo de actividades. Con el fin de analizar la repercusión de las prácticas docentes en los diferentes implicados se han pasado diferentes cuestionarios tanto al alumnado como a los tutores de los centros. Las encuestas pretenden evidenciar diferentes aspectos participativos, de implicación y de resolución de conflictos dentro del centro escolar, así como otros relacionados con cuestiones prácticas de la propia organización.
El estudiante en prácticas participará en las reuniones de los equipos educativos de los que forme parte y colaborará en los proyectos de innovación y en las actividades extraescolares que el centro desarrolle. Asimismo, asistirá a reuniones y actividades organizadas para que los/as estudiantes en prácticas conozcan en profundidad la realidad educativa del centro de prácticas. Estas actividades incluirán entre otras:
El modelo del docente como investigador en el aula centra la actividad del estudiante en formulación de preguntas relevantes, búsqueda de información, análisis, elaboración y posterior comunicación. El estudiante de prácticas habrá de afrontar desde esta perspectiva la preparación de sus intervenciones docentes, supervisadas por el tutor del centro de prácticas, así como la elaboración de informes sobre los distintos periodos de estancia en el centro educativo. En concreto:
En cualquier caso, el interés de este estudio radica en las competencias emocionales adquiridas a lo largo del proceso, por lo que la valoración se centra en los ítems indicados a continuación relacionados con dichas competencias:
Para valorar estos ítems hay que tener en cuenta el contexto de realización de las prácticas, ya que estas se realizan tanto en centros privados, como públicos y concertados, teniendo en cuenta las diferentes Comunidades Autónomas. El criterio de valoración numérica para el indicador 1 en relación a resultados de aprendizaje (motivar para el aprendizaje a lo largo de la vida) sigue la siguiente escala de Likert: Nada desarrollado 1 2 3 4 5 Totalmente desarrollado. El resto de indicadores (2, 3, 4, 5, 6 y 7) en relación a competencias básicas, específicas y transversales, sigue la siguiente escala de Likert: Poco aplicada 1, Aplicada 2, Aplicada y desarrollada 3, Desarrollada en nivel de excelencia 4.
Para llevar a cabo esta investigación hemos utilizado una investigación cuantitativa descriptiva de carácter transversal.
La población objeto de estudio está formada por 148 estudiantes del Máster de Formación del Profesorado en Enseñanza Secundaria, Bachillerato, Ciclos Formativos, Enseñanzas Deportivas y Escuela de Idiomas del curso 2017-2018.
La muestra está formada por 40 estudiantes elegidos según un método de muestreo no aleatorio, concretamente, un muestreo por juicio. Dicha muestra ha sido seleccionada por orden alfabético del primer apellido de los estudiantes de la población.
Dada que la dispersión de los datos es pequeña hemos utilizado la media aritmética de los datos para analizar los resultados.
a. Datos generales de la muestra
La muestra está formada por 22 hombres y 18 mujeres, no siendo significativa la diferencia de respuesta entre ambos.
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Gráfica 1 Género de la muestra |
En relación a la edad la media de la muestra se sitúa en la franja de 30 a 40 años, si bien existe una significativa dispersión de datos ya que la muestra recoge estudiantes con edades comprendidas entre los 24 a los 53 años.
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Gráfica 1 Género de la muestra |
b. Datos por indicadores
Tabla resumen de valores medios obtenidos para cada uno de los ítems objeto de nuestra investigación.
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Gráficas sobre los resultados |
En esta primera tabla de resultados podemos observar que hay dos ítems con unos resultados más bajos que las demás: ética y responsabilidad. Ampliaremos esta información en conclusiones.
Encontramos los siguientes resultados sobre cada uno de los ítems:
1. Motivar para el aprendizaje a lo largo de la vida: La mayor parte del alumnado ha sido capaz de aplicar y desarrollar los conocimientos adquiridos dentro de contextos más amplios relacionados con sus áreas de estudio sea cual sea su especialidad. Más de la mitad de la muestra ha llegado en este ítem a niveles de excelencia.
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Gráficas sobre los resultados |
2. Ética: En este ítem las valoraciones se quedan en la media. En opinión de los evaluadores 17 de 40 estudiantes han sido capaces de aplicar la integración de conocimientos y enfrentarse a la complejidad de formular juicios a partir de una información que, siendo incompleta o limitada, incluya reflexiones sociales y éticas, siendo un total de 23 (más de la mitad de los estudiantes) los que han sido capaces de aplicar y desarrollar dicha competencia. Ninguno de los estudiantes ha llegado a la excelencia en este caso.
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3. Responsabilidad: en este punto 30 de los 40 estudiantes evaluados han sido capaces de aplicar y desarrollar la competencia de asumir las consecuencias de las acciones que realizan y responder a sus propios actos. Uno de los estudiantes evaluados no ha conseguido llegar a los estándares requeridos.
4. Autoconfianza: Según la evaluación de los tutores y tal y como recoge este ítem la mayoría de los estudiantes al finalizar las Prácticas, estaría capacitado para actuar con seguridad y con la motivación suficiente para conseguir sus objetivos. 28 de los alumnos evaluados alcanzaría esta competencia con niveles de excelencia.
5. Trabajo en equipo: Este ítem es uno de los mejor valorados en la evaluación. Como podemos ver en los resultados, con una buena integración en el centro comprobamos que cada estudiante ha sido capaz de participar de una forma activa en la consecución de un objetivo común, escuchando, respetando y valorando las ideas y propuestas del resto de miembros de su equipo, en este caso de su tutor en el centro o del resto del claustro escolar.
6. Planificación: Tras haber realizado un esfuerzo exhaustivo para compaginar las prácticas con su trabajo y estudio, los alumnos han sido capaces de determinar eficazmente sus metas y prioridades definiendo las acciones, plazos y recursos óptimos requeridos para alcanzar tales metas con niveles de excelencia según este gráfico. 39 de los estudiantes evaluados han aplicado y desarrollado esta competencia en sus centros de prácticas.
7. Empatía: Después de haber convivido durante varios meses con los estudiantes del centro de Prácticas, el alumno del máster ha sido capaz de comprender el desarrollo de la personalidad de sus estudiantes y las posibles disfunciones que afectan al aprendizaje.
A través de este trabajo se ha pretendido mostrar las dificultades que encuentra el alumnado al desarrollar las Prácticas del Máster Universitario en Formación del Profesorado en Enseñanza Secundaria, Bachillerato o, Ciclos Formativos, Enseñanzas Deportivas y Escuelas de Idiomas impartido por la Universidad Europea de Valencia al realizar su Prácticum y las competencias que adquiere, a través de la superación de cada dificultad, así como a partir de la integración en el centro educativo en el que se sumergen los estudiantes.
Por otro lado, también se ha destacado cómo las entidades donde el alumnado desarrolla las prácticas se enriquecen por la aportación de dichos/as alumnos/as; así como los docentes que los tutorizan, ya sea en el propio centro o en la Universidad. Se ha observado que se crea un enriquecimiento mutuo en el que todos los participantes ganan: estudiantes, tutores, entidades educativas y, fundamentalmente, el futuro alumnado a quienes impartirán docencia los postgraduados.
Entre las competencias que adquieren los estudiantes después de realizar las prácticas docentes, curiosamente, como hemos podido comprobar, encontramos que las más desarrolladas tienen que ver con competencias emocionales, por encima de las cognitivas, aunque estas también las desarrollen.
Comenzamos comentando las dos competencias que han sido puntuadas con una valoración inferior, con el fin de trabajar en la mejora de las mismas. A lo largo del curso se insistirá en estas dos competencias a partir de juegos de roles, debates y casos en los que los estudiantes trabajen situaciones reales sobre Ética y Responsabilidad.
La Ética es un apartado muy importante que se aborda en el máster, en el sentido de que el “ser” del profesorado va a influir en los alumnos mucho más que el “saber”, sin infravalorar la capacidad docente e intelectual del profesor. Además, se insiste en la diferencia entre ética e ideología. Sin embargo, a veces, la duda en la valoración de este ítem surge en el sentido de que la ética y los valores del docente se pueden confundir con la transmisión de unos ideales preconcebidos, puesto que la docencia debe sembrar preguntas y fomentar la autenticidad, además del pensamiento crítico, con criterio y con responsabilidad.
De hecho, la Responsabilidad es otro de los aspectos en lo que hay que incidir, a la vista de los resultados obtenidos. Los docentes, no solo deben ser capaces de asumir las consecuencias de las acciones que realizan y responder a sus propios actos sino de mostrar a sus alumnos que los suyos tienen consecuencias y que deben meditar cada una de sus decisiones pensando en su beneficio, el de las personas que les rodean y el de su entorno. Por ello se les proponen actividades y acciones orientadas a la Responsabilidad Social Corporativa que, junto con las orientadas a la diversidad y a la innovación, tienen un peso específico en la evaluación de la Memoria de Prácticas.
Las demás competencias han sido valoradas con un elevado resultado.
Una de estas competencias a destacar es la de la Planificación. En el período correspondiente a las Prácticas se insiste, por un lado, en que el docente debe aprender a introducir una unidad docente en el contexto de una planificación escolar a lo largo del calendario académico y, por otro, en que tiene que ser capaz de combinar flexibilidad y rigor a la hora de realizar cada una de las dinámicas. Para ello es fundamental tener programadas actividades esenciales para el tema y otras de las que se pueda prescindir o que puedan pasar de individuales a grupales, según el índice de participación del alumnado y el objetivo que se haya propuesto cada responsable de la clase.
En el apartado de la Empatía es donde se valora precisamente la capacidad del docente para captar comprender el desarrollo de la personalidad de sus estudiantes y las posibles disfunciones que afectan al aprendizaje, así como su diversidad en aspectos tanto cognitivos (Altas Capacidades, TDHA, Asperger, dificultades de Audición y Lenguaje…) como emocionales (depresión, acoso, baja autoestima…) o socioculturales (adaptación al idioma, a la cultura…).
Es fundamental, en este sentido, que los futuros profesores transmitan una Autoconfianza alta, actuando con seguridad en sus clases y en la resolución de conflictos y, a la vez, sean capaces de fomentar la autoestima en sus propios estudiantes. Insistimos en que la autoestima nada tiene que ver con la prepotencia o con un ego elevado, sino en conocerse, valorar las capacidades que cada uno tiene y creer en uno mismo para incrementar nuestros talentos con el fin de ser unas excelentes profesionales y mejores personas.
Todo ello no sería posible sin un trabajo en equipo Integrador en el que se implican diferentes participantes, con los cuales el alumno tiene que interactuar, en algún momento, desde el inicio de las prácticas hasta el final:
Cabe destacar, para finalizar, que la valoración más elevada ha sido la “Motivar al aprendizaje a lo largo de la vida”, lo que demuestra sin duda la necesidad de un cambio profundo en el sistema educativo, en el que no deben primar los conocimientos orientados a un examen puntual, sino la curiosidad por aprender de forma libre y motivada.
Por ello, en el máster de Formación del Profesorado de la Universidad Europea tratamos de potenciar este aspecto entre los futuros docentes, tratando de que sean ellos quienes motiven a sus propios estudiantes y aporten incentivos suficientes en sus clases para que quieran seguir aprendiendo, no solo en el contexto escolar, sino fuera del aula. Así pues, otro de los aspectos que hemos introducido desde hace varias promociones son las actividades transversales, precisamente porque creemos en la educación experiencial y tratamos de motivar a los futuros docentes a que incentiven actividades fuera del aula. Estas dinámicas pueden aplicarse a las actividades extraescolares donde se produzca un aprendizaje significativo, a las tutorías dirigidas a la preparación para la vida, a los encuentros con familias y a otros proyectos de centro en los que intervenga uno o varios ciclos educativos.
El sistema educativo, por tanto, debe incidir en las prácticas como valor en alza que potencie la formación experiencial donde se manifieste la vocación de los docentes.